Un curso de milagros oración a dónde quieres que vaya
El perdón es la enseñanza central del Curso y, sin embargo, hay mucha confusión en torno a este tema, dado que lo que a menudo se nos enseña sobre el perdón tiende a estar en desacuerdo con lo que el Curso dice al respecto.
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La verdad sobre Un curso de milagros
Pregunta: “No entiendo cómo el perdón en el Curso es diferente de culpar a la víctima. Sé que las personas abusivas pueden, y han, abusado del Curso y de otras enseñanzas espirituales para actuar desde el ego y herir a otros. Sin embargo, todavía veo en el Curso entre sus maestros que la persona que fue lastimada debe entonces perdonar “aceptando que lo que pensabas que sucedió, no sucedió” y dándose cuenta de que uno “eligió lastimarse a sí mismo a través del abusador” y otros conceptos”.
Si tratamos de entender la enseñanza del Curso sobre el perdón a través del ego, se distorsionará el verdadero significado del perdón. En otras palabras, el perdón parecerá significar que tengo que perdonar a mi victimario aceptando que yo me lo busqué y luego “aceptando que lo que pensé que había sucedido, no sucedió”. Este no es el perdón que describe el Curso.
El verdadero perdón, según “Un curso de milagros”, se aprende. Aprendo a perdonar de verdad cuando estoy dispuesto a entregar mis juicios/creencias/expectativas al Espíritu Santo para que los reinterprete. Esto me lleva a experiencias que me demuestran que este mundo no es lo que yo pensaba que era. El verdadero perdón no culpa a la víctima ni al victimario, porque en verdad, somos pura mente. Si NO HAY cuerpos, no hay víctimas ni victimarios.
Acim perdón a-destruir
“¿Qué quieres que el perdón no pueda dar? ¿Quieres paz? El perdón te la ofrece. ¿Quieres felicidad, una mente tranquila, una certeza de propósito, y un sentido de valor y belleza que trascienda el mundo? ¿Quieres cuidado y seguridad, y el calor de una protección segura siempre? ¿Quieres
Todo esto te ofrece el perdón, y mucho más. Brilla en tus ojos al despertar, y te da alegría con la que afrontar el día. Alivia tu frente mientras duermes, y descansa sobre tus párpados para que no veas sueños de miedo y maldad, malicia y ataque.
Y cuando vuelves a despertar, te ofrece otro día de felicidad y paz. El perdón permite levantar el velo que oculta el rostro de Cristo a quienes miran al mundo con ojos implacables. Es
umbral de tu mente. ¿Qué quieres que el perdón no pueda dar? ¿Qué otros dones son dignos de ser buscados? ¿Qué valor imaginario, efecto trivial o promesa pasajera, que nunca se cumplirá, puede albergar más esperanza que lo que trae el perdón?” (W-122.1-3, Un Curso de Milagros)
Curso de milagros oración diaria
Antes de que podamos entender el proceso de 3 pasos para perdonarte a ti mismo, es importante que nos tomemos un momento para considerar cómo define Un Curso de Milagros el perdón, y qué significa exactamente perdonar.
Esta definición se remonta a la idea central del curso de que sólo existe el amor. Si la ira, la frustración o el odio son una respuesta a alguna acción que necesita perdón, entonces uno debe entender que estas emociones no son reales. No representan un pecado, en el sentido tradicional de la palabra, sino más bien una falta de conciencia del amor incondicional.
En el primer paso, hay que reconocer que el origen de cualquier problema está siempre dentro de uno mismo. El curso nos enseña que el mundo exterior no es más que un símbolo, o un reflejo, de tus creencias y comprensiones actuales.
Para que tengas una experiencia que perdonar, debes haber creído que alguna otra persona o fuerza causó que te ocurriera un suceso negativo. Sin embargo, esto nunca es así. Todos los individuos actúan siempre a tu servicio, y sólo pueden reflejar tu actitud actual.