Acordaos de la Virgen María
ANTÓFONA DE ENTRADAProverbios 23, 24a, 25Gran alegría llena el corazón de un padre cuando su hijo es justo.Que se alegren tu padre y tu madre,que se regocije la que te dio a luz. COLECTA Padre todopoderoso, que en la maravilla de tu sabiduría y de tu amor decretaste que tu Hijo naciera de una mujer y se sometiera a su guía, concédenos penetrar cada vez más en el misterio de tu Verbo encarnado y llevar con él una vida oculta en la tierra hasta que, escoltados por su Virgen Madre, podamos entrar gozosos en tu casa del cielo.Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, Dios, por los siglos de los siglos.Ir al esquema II
Cuando se cumplieron los días de su purificación según la ley de Moisés, María y José llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarlo al Señor.Cuando María y José hubieron cumplido todas las prescripciones de la ley del Señor, volvieron a Galilea, a su propia ciudad de Nazaret.El niño, Jesús, creció y se hizo fuerte, lleno de sabiduría; y el favor de Dios fue sobre él.O: Lc 2,41-52Jesús bajó con ellos y vino a Nazaret, donde estuvo sujeto a ellos.
Letanías de la Santísima Virgen María en igbo
Como tantas formas de devoción popular, las novenas comenzaron en la Edad Media, con triduos y septenarios, en preparación de una solemnidad, o bien para realzar la riqueza de las octavas que seguían a una solemnidad.
Algunas cofradías se dotaban de un calendario propio, rico en todo tipo de devociones, al margen del año litúrgico. Las primeras novenas conocidas fueron a la Inmaculada Concepción y por Navidad; ambas prestan especial atención a la Virgen María, pero están destinadas a orientar el corazón de los fieles hacia los misterios de la salvación obrada por Jesucristo. Las “grandes antífonas” que se cantan en las vísperas de Navidad en la Iglesia católica son un vestigio de ello. Teniendo entonces los fieles un acceso limitado a las riquezas de la liturgia, las novenas eran un medio precioso de preparación personal para las fiestas importantes.
Las Sagradas Escrituras (Hch 1,14) nos dicen que durante 9 días, los apóstoles, con María y algunas mujeres, esperaron a ser dotados de “la fuerza de lo alto”. Así nació la novena de Pentecostés, una novena mediante la cual los fieles meditan y se preparan para el don del Espíritu, como invitaban a hacerlo las oraciones de la Iglesia de entonces.
Oración espíritu santo
ORACIÓN DEL ÁNGEL Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, te adoro profundamente. Te ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Jesucristo, presente en todos los sagrarios del mundo, en reparación de los ultrajes, sacrilegios e indiferencias con que Él es ofendido. Por los méritos infinitos del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María, suplico la conversión de los pobres pecadores.
“Jesús quiere servirse de vosotros para darme a conocer y amar, para establecer en el mundo la devoción a mi Corazón inmaculado. A los que lo hagan, les prometo la salvación y estas almas serán queridas por Dios como flores puestas por mí para adornar su trono. “
Letanía del mes de enero
Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo; bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Santa María, ayuda a los necesitados, da fuerza a los débiles, consuela a los afligidos, ruega por el pueblo de Dios, asiste al clero, intercede por los religiosos. María,todos los que buscan tu ayuda,experimentan tu protección indefectible.Amén.
Reina mía,Madre mía,me ofrezco enteramente a ti. Y para mostrarte mi devoción, te ofrezco hoy mis ojos, mis oídos, mi boca, mi corazón, todo mi ser sin reservas. Por lo tanto, buena Madre, ya que soy tuyo, guárdame, guárdame como tu propiedad y posesión. Amén.
Oh Santísima Virgen María, Reina del Santísimo Rosario, que te complaciste en aparecer a los niños de Fátima y revelarles un mensaje glorioso. Te suplicamos que inspires en nuestros corazones un ferviente amor por el rezo del Rosario. Que, meditando los misterios de la redención que en él se recuerdan, obtengamos las gracias y virtudes que te pedimos, por los méritos de Jesucristo, nuestro Señor y Redentor.Amén.