Novena de San Gerardo para un parto seguro
Ser una futura madre significa especialmente formar parte de la acción creadora de Dios. Pero también tener que soportar la fatiga y la espera que acompañan al embarazo. ¿Cuáles son las oraciones por las mujeres embarazadas? ¿Quién es el protector de las embarazadas? Y para todos los demás: ¿qué regalo hacer a una nueva madre? He aquí algunas respuestas en este artículo.
¿Quién es el protector de las embarazadas? Hay muchas. Varias mujeres han sido santas madres en su vida o han ayudado a otras mujeres a serlo. Una de ellas es Santa Margherita da Cortona: contamos su apasionante historia en un artículo de nuestro blog. Otra gran mujer, a la que se invoca como protectora de las mujeres en el parto, es Santa Ana, madre de María. Pero, sin duda, la Madre de las Madres es ella: María de Nazaret, madre de Jesucristo, Madre de Dios y Reina de la Familia.
Una joya con un significado particular es el colgante llamador de ángeles. Las características de este colgante son la forma esférica y la campana interna. Cuando se mueve, el colgante llamador de ángeles emite un sonido suave y agradable, llamado la llamada de los ángeles. Esta joya expresa el deseo de que los ángeles, atraídos por este sonido, velen por el niño y lo protejan.
¿Cómo rezo a Santa Ana para concebir?
Buena Santa Ana, se te concedió el favor del Señor de llevar en tu seno a la Santísima Virgen María. Tú conoces mi profundo deseo de tener un hijo: un pequeño al que amar, abrazar, cuidar y querer, para que mi cuerpo pueda concebir y dar a luz un bebé hermoso y sano a la santa imagen de Dios.
¿A qué santo rezas por el embarazo?
San Antonio de Padua
Si estás intentando quedarte embarazada, puedes rezar por ello a San Antonio. Pídele tener un vientre sano, ser bendecida con el milagro de un embarazo, ser fértil como Sara en la Biblia.
Novena por un embarazo y parto seguros
Santa Ana era la esposa de San Joaquín, y fue elegida por Dios para ser la madre de María, Su propia bendita Madre en la tierra. Ambos pertenecían a la casa real de David, y sus vidas estaban totalmente ocupadas en la oración y las buenas obras. Sólo una cosa faltaba en su matrimonio: no tenían hijos, y esto era considerado como una amarga desgracia entre los judíos. Después de una larga espera, cuando Ana ya era una mujer mayor, nació María, fruto de la gracia y luego de la naturaleza, hija más de Dios que del hombre. Con el nacimiento de María, la anciana Ana comenzó una nueva vida: observaba cada uno de sus movimientos con reverente ternura, y se sentía santificada por la presencia de su inmaculada hija.
Ana había prometido su hija a Dios, y ella, con Joaquín, condujo a su hija María por la escalinata del Templo y la vio pasar sola al santuario interior y luego no la vio más. Así Ana se quedó sin hijos en su solitaria vejez, y privada de su más pura alegría terrena justo cuando más la necesitaba.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. Amén.Gloriosa Santa Ana, te consideramos llena de compasión por los que te invocan y de amor por los que sufren. Cargado con el peso de mis penas, me arrojo a tus pies y te suplico humildemente que tomes bajo tu especial protección el presente asunto que te encomiendo
Novena de San Gerardo por un embarazo seguro
Pedimos la intercesión de Santa Ana en todo lo relacionado con la maternidad y el hogar, ya que es la patrona de las amas de casa y de las madres. Ana es la madre de Nuestra Santísima Madre María y la abuela de Jesucristo.
Oración a Santa AnaGloriosa Santa Ana, llena de compasión por los que te invocan y de amor por los que sufren, cargado con el peso de mis penas, me arrojo a tus pies y te suplico humildemente que tomes bajo tu especial protección el presente asunto que te encomiendo, te dignes encomendarlo a tu Hija, la Santísima Virgen María, y lo pongas ante el trono de Jesús, para que Él lo lleve a feliz término. No dejes de interceder por mí hasta que mi petición sea concedida. Consígueme sobre todo la gracia de contemplar un día a mi Dios cara a cara, y contigo y María y todos los Santos, alabarle y bendecirle por toda la eternidad. Buena Santa Ana, madre de Aquella que es nuestra Vida, nuestra Dulzura y nuestra Esperanza, ruega por nosotros y obtén nuestra petición. (3 veces)Si te gusta esta oración, ¡te encantarán estas estampas!
Patrona de la oración durante el embarazo
Incluso en los primeros siglos de la Iglesia, los Padres no podían separar lo que era legendario en este libro de lo que (si es que había algo) era verdad. Obviamente, la Santísima Virgen María tuvo padres. Teniendo en cuenta las extraordinarias gracias que Dios concedió a María, es lógico pensar que su madre y su padre también fueron muy amados por Dios. Más que eso, nadie puede decirlo con certeza. Lo que sigue, pues, es la leyenda de Santa Ana y su esposo, San Joaquín.
Su hogar estaba en Jerusalén, y aunque habían vivido juntos larga y felizmente, Ana y Joaquín se afligían por no tener hijos. Este es un problema que aflige a muchos matrimonios que anhelan tener un hijo, pero se encuentran con que la infertilidad ha hecho difícil, si no imposible, concebir. En tales casos, Santa Ana es la santa a la que acudir.
Un día, cuando Joaquín llevaba una ofrenda al templo, un fiel llamado Rueben se burló de él diciéndole que quien no había engrosado el pueblo de Israel engendrando hijos no tenía por qué hacer sacrificios. Angustiado y humillado, Joaquín se fue al desierto, donde ayunó y oró durante 40 días, rogando a Dios que bendijera a Ana y a él con un hijo. De repente, un ángel bajó del cielo y le dijo: “¡Joaquín! El Señor ha escuchado tu oración. Vuelve a casa, porque tu mujer Ana va a concebir”.