Catequesis del Camino Neocatecumenal
El Señor nos ha llamado a vivir un camino de conversión, a través del cual vamos descubriendo las inmensas riquezas de nuestra fe en un catecumenado postbautismal. Durante este catecumenado, poco a poco, etapa a etapa, paso a paso, vamos descendiendo a las aguas de la regeneración eterna, para que el bautismo que la Iglesia nos ha conferido en el pasado, se convierta, por nuestra adhesión a él, en sacramento de salvación, buena noticia para todos los hombres. A través del Neocatecumenado, se abre en el centro de la parroquia un camino de iniciación cristiana que desarrolla una pastoral de evangelización para adultos, Esta evangelización está llevando a una fe viva a muchos de nuestros hermanos y hermanas que hoy viven un cristianismo de hábito, y está dando a muchas personas sumergidas en un mundo secularizado la posibilidad de encontrarse con Nuestro Señor Jesucristo a través de comunidades cristianas que viven su fe a nivel adulto: de amor en la dimensión de la cruz y de unidad perfecta.
Para nuestro asombro, asistimos a una palabra que, haciéndose carne entre esta pobre gente que la acogió con alegría, hizo nacer una comunidad en oración y una liturgia sorprendente como respuesta de todos estos hermanos, cargados de pecados, que bendecían al Señor por haberse acordado de ellos. Así, en el espacio de tres años, vimos aparecer ante nuestros ojos un trípode sobre el que se asentaría el Camino que el Señor estaba creando: el embrión de un Catecumenado, en una Iglesia donde nacía la comunión fraterna, en la que el amor adquiría una dimensión que sorprendía a todos: la dimensión de la cruz donde se muere por el enemigo.
Segundo escrutinio vía neocatecumenal
La idea fundamental de Kiko es que el bautismo de niños es como una semilla dormida, casi muerta, dentro de la mayoría de los cristianos. Por ello, se hace necesario reavivarlo mediante un periodo de “catecumenado”, o más bien de “Neocatecumenado”, como él lo llama.
La vía prevé que el “Camino” propiamente dicho se componga de seis etapas de iniciación que duran en total al menos de ocho a diez años. El paso de una etapa a otra no es automático. Un tribunal de catequistas realiza el examen. Puede haber suspensos y las personas excluidas pueden quejarse. Por ello, el Camino puede durar más de los ocho o diez años habituales.
La primera etapa es el Kerigma, o más bien el “anuncio de la salvación”. El proceso comienza cuando un sacerdote decide introducir la experiencia del Neocatecumenado en su parroquia, mediante la predicación de catequistas itinerantes. Éstos dirigen grupos de catequesis introductoria, que con el tiempo deberían dar lugar a nuevas comunidades de 30-50 personas. Si se supera el límite de miembros, se crean otras comunidades.
Canciones del Camino Neocatecumenal
Doy gracias al Señor por habernos dado la oportunidad de este encuentro, en el que renováis vuestros vínculos con el Sucesor de Pedro, acogiendo una vez más el mandato que Cristo resucitado dio a sus discípulos: “Id por todo el mundo y predicad el Evangelio a toda la creación” (Mc 16,15).
Desde hace más de 40 años, el Camino Neocatecumenal contribuye al renacimiento y a la consolidación de la iniciación cristiana en las diócesis y en las parroquias, favoreciendo un redescubrimiento gradual y radical de las riquezas del Bautismo y ayudando a saborear la vida divina, la vida celestial que el Señor inauguró con su Encarnación, viniendo en medio de nosotros, naciendo como uno de nosotros.
Este don de Dios a su Iglesia se pone “al servicio del Obispo como una de las formas de realización diocesana de la Iniciación cristiana y de la educación permanente en la fe” (Estatuto, art. 1 § 2). Este servicio, como os recordaba mi Predecesor el Siervo de Dios Pablo VI en su primer Encuentro con vosotros en 1974, “podrá renovar en la comunidad cristiana de hoy aquellos efectos de madurez y de profundización que en la Iglesia primitiva se adquirían en el período de preparación al Bautismo” (Insegnamenti di Paolo VI, XII [1974], 406).
Escándalo del Camino Neocatecumenal
Vivir y promover este despertar es lo que usted llama una forma de “postbautismo” que puede renovar en las comunidades cristianas de hoy los efectos de madurez y profundización que se daban en la Iglesia primitiva en el período de
la sagrada costumbre de conferir el bautismo a los recién nacidos, concentrando en el rito bautismal su preparación que, en los primeros tiempos, cuando la sociedad era profundamente pagana, precedía al bautismo, y se llamaba catecumenado. Pero en
El 18 de marzo de 2016, el Papa Francisco envió a 250 familias formando 50 nuevas missio ad gentes para los cinco continentes. Durante este encuentro, el propio Papa Francisco explicó en qué consiste esta modalidad misionera: “la missio ad gentes
En estas notas biográficas vais a ver a una mujer excepcional, muy importante para la Iglesia, enamorada de Cristo, de la Escritura y de la Eucaristía. Tenía clara conciencia de que Dios le había dado la misión de apoyarme, defenderme y corregirme, por el bien del Camino Neocatecumenal.Doy gracias a Dios por Carmen que siempre me ha dicho la verdad, constantemente. Era muy inteligente, una mujer profunda, auténtica y libre en sus relaciones con todos. Amaba a Cristo y a la Iglesia y al Papa, por encima de todo.