Oración milagrosa de San Benito
Señor mío. Tú lo eres todo para mí. Alabo tu Santo nombre por recordarme quién eres y quién soy yo. Gracias por amarme y darme la vuelta. Gracias por cambiarme y purgar mi mente, cuerpo y alma. Gracias por escuchar mis oraciones y no rendirte conmigo. Tu misericordia, amor y bondad son incomparables.
Gracias Padre Celestial por sanar mi garganta y concederme hoy tres entrevistas. También te doy las gracias por la confirmación de las preocupaciones sobre las relaciones y por cambiar mi respuesta a lo habitual. Alabado sea tu nombre por la ampliación de mi cuenta y la paz interior inmediata.
Dios es bueno! mi marido ha estado sin trabajo y tuvimos un bebé en octubre. Él ha provisto todo lo que necesitamos. Ha usado a sus misericordiosos seguidores para mostrarse a nosotros. No nos ha faltado de nada gracias a la gracia y misericordia de Dios.
QUIERO DAR LAS GRACIAS A LA BENDITA TRINIDAD – EL PADRE TODOPODEROSO, NUESTRO REDENTOR Y REY JESUCRISTO Y EL HERMOSO EMBELLECEDOR – EL ESPIRITU SANTO. GRACIAS BENDITA MADRE MARIA POR TUS INTENCIONES. GRACIAS MI ANGEL DE LA GUARDA. GRACIAS SANTA CATALINA, MI SANTA PATRONA. GRACIAS A TODOS LOS ARCÁNGELES, A LA HUESTE DE LOS ÁNGELES, A LOS DIVERSOS SANTOS PATRONOS DE MI FAMILIA Y A TODOS LOS SANTOS POR SU CONTINUA INTECESIÓN. MI FAMILIA Y YO ESTAMOS MUY AGRADECIDOS. AMÉN.
Libro de oraciones de san benedicto pdf
Uno no puede ni siquiera echar un vistazo al texto de la Regla de San Benito sin darse cuenta del gran número de citas de la Biblia que contiene. En un estilo sereno y ameno, Demetrius Dumm, monje de la Archabadía de San Vicente en Latrobe, Pensilvania, explora el uso que Benito hace de la Biblia en referencia a temas monásticos habituales como la obediencia, la pobreza y la vida comunitaria. Estas reflexiones están salpicadas de pequeñas anécdotas de su experiencia de vida monástica. Lo más conmovedor de todo es la insistencia de Dumm en la importancia del amor y la compasión en la Regla de Benito. Para quienes tienen responsabilidades en el monasterio, como el abad o el celador (encargado de los bienes del monasterio), la compasión es especialmente importante. La autoridad ejercida sin amor es tiránica. Dumm dice que si atendemos a la importancia del amor, entonces “cómo se hace un trabajo es tan importante como que se haga”. (Dumm, p. 103) En la vida cristiana, informada por las Escrituras y la Regla, Dumm dice que no hay lugar para sacrificar seres humanos a una tarea que debe hacerse.
Breve oración a San Benito
La Abadía de Mepkin es un hogar lejos de casa. Después de participar 18 años en el Programa de Huéspedes Monásticos, me deslizo en la rutina como una mano en un guante. Es una prolongación de mi vida en Connecticut. En ese sentido, Mepkin es un monasterio sin muros.
Cumpliré 80 años en agosto de 2018 y, por gracia, gozo de buena salud, espiritual, mental y física. Mepkin me ha ayudado a aquietar mi alma, a vivir en el Momento Presente, a vivir en la Presencia de Dios, a envejecer con gracia. Aunque he hecho grandes progresos en este campo, aún me quedan muchos kilómetros por recorrer. Y estoy deseando emprender el viaje. Ser más compasiva. Para “escuchar con el oído de mi corazón” (San Benito). Apreciar más que la Tierra “está cargada de la grandeza de Dios” (GM Hopkins).
El Programa de MG proporciona esto al requerir que los MG se sumerjan en la oración y el trabajo de la comunidad. Rezamos las Horas siete veces al día. Asistimos a misa todos los días. Y trabajamos cuatro horas al día seis días a la semana. Aunque esto pueda parecer un horario rígido, hay mucho tiempo para la meditación, la lectura y el ejercicio.
Oración de San Benito en español
Los dominicos americanos distinguen entre espiritualidad de la Creación y espiritualidad de la Redención. La espiritualidad de la Redención hace hincapié en la culpa, el pecado y la Redención por Jesucristo. La Creación es anterior a la Redención. Es el primer don de Dios a la humanidad. La espiritualidad de la creación está marcada especialmente por la gratitud por la belleza de Dios que brilla a través de la creación. Comparando la espiritualidad benedictina con estos dos tipos de espiritualidad, me parece que se inclina más hacia la espiritualidad de la Creación. Benito habla menos de la culpa y el pecado, y más de la vida cotidiana de la comunidad, en la que se refleja el orden de la Creación. A Benito le preocupa el cuidado de la creación y la alabanza al Creador, que nos ha dado este maravilloso mundo para que lo cuidemos.
En el cap. 16, Benito revela su teología de la oración en una breve frase: Demos, en esas horas, alabanza a nuestro Creador por sus justos juicios (RB 16, 5). La oración coral es, por tanto, principalmente una cuestión de alabar a Dios como nuestro Creador. En la alabanza nos concentramos totalmente en aquel a quien alabamos. El monje se olvida de sí mismo en su alabanza. Deslumbrado, contempla la belleza de la creación que Dios extiende ante él. Cuando el monje se olvida de sí mismo al alabar a Dios, alcanza su verdadero yo. Para el Antiguo Testamento, la alabanza es la forma más característica de la existencia humana. Alabar y dejar de alabar: estas acciones son tan diferentes como la vida y la muerte” (Gerhard von Rad). Es parte de la esencia misma del hombre elevar los ojos hacia algo, admirarlo y venerarlo. Sin alabanza, el hombre se marchita; no ve más allá de sí mismo y de sus necesidades. Al alabar al Creador, el monje aprende que es esencialmente una criatura, que ha recibido y sigue recibiendo su existencia de la mano del Creador. Dios no creó la creación hace años luz, sino que la mantiene continuamente en existencia. Dios está constantemente en el acto mismo de crear.