Novena de san maximiliano kolbe pdf
Dios de la vida, Tú me hiciste a Tu imagen perfecta, para vivir en Tu amor y darte gloria, honor y alabanza. Abre mi corazón a Tu poder sanador. Ven, Señor Jesús, calma mi alma como susurraste “Paz” al mar tempestuoso. San Judas, santísimo Apóstol, en mi necesidad acudo a ti. Te ruego que intercedas por mí para que encuentre fuerzas para superar mi enfermedad. Bendice a todos los que luchan contra la adicción. Tócalos, cúralos, asegúrales el amor constante del Padre. Permanece a mi lado, San Judas, para ahuyentar todas las malas tentaciones, miedos y dudas. Que la serena seguridad de tu presencia amorosa ilumine la oscuridad de mi corazón y traiga una paz duradera. Amén.
Citas de San Maximiliano Kolbe
San Maximiliano Kolbe, tu vida de amor y trabajo por las almas fue sacrificada en medio de los horrores de un campo de concentración y acelerada a su fin por una inyección de una droga mortal. Mira con compasión a (tu nombre) que ahora está atrapado en la adicción a (nombra tu adicción) y a quien ahora encomiendo a tu poderosa intercesión. Habiendo ofrecido tu propia vida para preservar la de un padre de familia, me dirijo a ti con confianza, seguro de que comprenderás y ayudarás. Obtén para mí la gracia de no negar nunca mi amor y comprensión, ni faltar a la oración perseverante para que se rompan los lazos esclavizantes de la adicción y se le devuelva la plena salud a él, a quien amo. Nunca dejaré de estar agradecido a Dios que me ha ayudado y ha escuchado tu oración por mí. Amén.
Oración de San Maximiliano Kolbe a María
Obtén para nosotros la gracia de no negar nunca nuestro amor y comprensión, ni faltar a la oración perseverante para que se rompan los lazos esclavizantes de la adicción y se restablezca la plena salud y libertad de aquel a quien amamos.
Sabemos que amabas a la familia, porque moriste para salvar la vida de un esposo y padre. Trabajaste duro para difundir el Evangelio a las familias en Polonia, Japón y más allá. Querías mucho a tu propia familia, te sacrificabas por ella y rezabas por ella. Por favor, ayuda a nuestra familia a seguir a Jesús todos los días de nuestra vida. Ayúdanos a permanecer unidos en la fe, incluso cuando no podamos estar juntos. Ayúdanos a amarnos unos a otros para que sirvamos con alegría. San Maximiliano Kolbe, que fuiste hijo, hermano y padre espiritual de muchos, haz que honremos a nuestros padres, respetemos a nuestros hermanos y demos buen ejemplo a todos los que nos admiran. Por favor, intercede por nosotros, para que seamos una familia verdaderamente católica. Amén.
Dios de misericordia, te bendecimos en nombre de tu Hijo, Jesucristo, que atendió a todos los que acudieron a Él. Dale Tu fuerza a N., Tu siervo, atado por las cadenas de la adicción. Envuélvelo en Tu amor y devuélvele la libertad de los hijos de Dios. Señor, mira con compasión a todos aquellos que han perdido su salud y su libertad. Devuélveles la seguridad de tu misericordia inagotable, y fortaléceles en el trabajo de recuperación. A quienes cuidan de ellos, concédeles comprensión paciente y un amor que persevere. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.
Oracion a santa dymphna
Oh Señor Jesucristo, que dijiste: “Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos”, por intercesión de San Maximiliano Kolbe, cuya vida ilustró tal amor, te suplicamos que nos concedas nuestras peticiones.
A través del movimiento de los Caballeros de la Inmaculada, que Maximiliano fundó, difundió por todo el mundo una ferviente devoción a Nuestra Señora. Dio su vida por un total desconocido y amó a sus perseguidores, dándonos un ejemplo de amor desinteresado por todos los hombres, un amor que se inspiraba en la verdadera devoción a María. Concédenos, Señor Jesús, que también nosotros nos entreguemos sin reservas al amor y al servicio de nuestra Reina celestial, para amar y servir mejor a nuestros semejantes, a imitación de tu humilde siervo san Maximiliano Kolbe.
Oh Señor Jesucristo, que dijiste: “Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos”, por intercesión de san Maximiliano Kolbe, cuya vida ilustró tal amor, te suplicamos que nos concedas nuestras súplicas.