Poderosa oración al Santísimo Sacramento
Puede que nos sintamos estresados sólo de pensarlo. La vida puede volverse frustrante cuando nos vemos obligados a salir de nuestra rutina diaria durante varias semanas. Hay mucho en juego, no sólo la salud de nuestra familia, sino también nuestra situación económica.
Los tiempos difíciles nos llaman a acudir a Dios con mayor fe y confianza y a ayudar a nuestros hijos a hacer lo mismo. Rezar juntos en familia es una manera maravillosa de calmar a los ansiosos, templar a los hiperactivos, animar a los piadosos y centrar a los distraídos.
Gracias a Dios por la tecnología y las redes sociales. Probablemente nunca pensaste que dirías esto, pero sí, gracias a Dios por la capacidad de conectarnos virtualmente con otros cuando estamos aislados. Miren y participen juntos en la Misa transmitida en vivo como si estuvieran presentes en la Iglesia, diciendo verbalmente las respuestas en voz alta como una familia.
Orar ante Jesús en Adoración Eucarística es otra manera de guiar a nuestras familias a través de esta crisis mundial. Nuestro mundo necesita oraciones. Hacer esto con los niños les ayuda a apreciar el don de la Eucaristía y les instruye en el valor del silencio en nuestras ruidosas vidas.
Oraciones de adoración al Santísimo Sacramento
Como joven católico, siempre estuve muy involucrado. Comenzando con el ministerio de los niños a través de la escuela dominical, aprendí los fundamentos del estudio de la Biblia desde las 12 tribus hasta los 12 apóstoles. Serví como monaguillo durante varios años, me uní al coro a los 10 años y desarrollé un amor por la música litúrgica y el calendario litúrgico que me acompañaría toda la vida. El coro de las 10:30 de la mañana me ofreció la primera oportunidad de experimentar la adoración eucarística. Los ensayos del coro coincidían con la Exposición Eucarística y la Bendición de los miércoles por la tarde. Fue allí donde “Tantum Ergo”, “O Salutaris Hostia” y “Santo Dios, alabamos tu nombre” se grabaron permanentemente en mi alma. Sin embargo, lo que todavía no existía era una relación personal con el Señor a través de la presencia real de Jesús en el Santísimo Sacramento. La Bendición del Santísimo Sacramento fue una gran experiencia, no me malinterpreten. No me aburría. Pero a los 10 años, no lo entendía realmente -no del todo- y mi educación católica privada no estaba desentrañando realmente lo que significaba que la Eucaristía fuera el cuerpo, la sangre, el alma y la divinidad de Jesús. Estaba empezando a asimilarlo, pero aún no me había llegado al corazón.
Oración de adoración al Santísimo Sacramento
Share683Pin263Tweet946 SharesSi le intimida la idea de llevar a los niños más pequeños (o incluso a los adolescentes) a una tranquila capilla de adoración eucarística… o incluso a rezar ante el sagrario… anímese: Muchos padres ya llevan a sus hijos a la adoración eucarística, con buenos resultados.
Kimberly Fries dice que su marido lleva regularmente a su hija de cinco años a la adoración. “Es lo mejor de su semana. También le encanta jugar a la adoración con nuestra familia. Sólo lleva su rosario y un libro. A veces sólo quiere sentarse y mirar la Eucaristía, otras veces se pone un poco inquieta, así que él la deja ir a la pequeña biblioteca que hay junto a la capilla y elegir otro libro”. Dice que en realidad tampoco afecta a su oración porque ella sabe sentarse bien a esta edad”. Ella y su marido traen incluso a su hija de tres años, que “sabe lo que hay que hacer”, aunque no pueda quedarse demasiado tiempo.
La adoración eucarística es la práctica de rezar ante Jesús en forma de hostia eucarística. La hostia puede estar expuesta en un recipiente especial conocido como custodia, o reservada en un sagrario. (El sagrario es el lugar donde se guardan las hostias eucarísticas después de la celebración de la Misa; se indica con una luz o una vela).
Oraciones de adoración y bendición
18 En aquel tiempo, los discípulos se acercaron a Jesús y le preguntaron: “¿Quién es el mayor en el Reino de los Cielos?” 2 El llamó a un niño, al que puso en medio de ellos, 3 y dijo: “En verdad os digo que si no cambiáis y os hacéis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos. 4 El que se haga humilde como este niño es el mayor en el Reino de los Cielos. 5 El que acoge a un niño como éste en mi nombre, a mí me acoge.Mateo 18:1-5 NRSV-CE
A mí me parece que los incidentes humillantes que muchos padres han encontrado en la iglesia con sus hijos pequeños (“¿Ya terminamos?” durante la consagración, ¿alguien?) son justo lo que Jesús prescribió y deberíamos llevar a los niños a Él.
13 Se le acercaban los niños para que les impusiera las manos y orara. Los discípulos hablaron con severidad a los que los traían; 14 pero Jesús dijo: “Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis; porque de los que son como ellos es el Reino de los Cielos.” 15 Les impuso las manos y siguió su camino.Mateo 19:13-15 NRSV-CE