Breves oraciones de bendición

Me esforzaré hoy por llevar una vida sencilla, sincera y serena, repeliendo con prontitud todo pensamiento de descontento, ansiedad, desaliento, impureza y egoísmo; cultivando la alegría, la magnanimidad, la caridad y el hábito del santo silencio; ejercitándome en la economía en el gasto, la generosidad en el dar, el cuidado en la conversación, la diligencia en el servicio señalado, la fidelidad a toda confianza y una fe filial en Dios.

Concédenos, Señor, paciencia para seguir tu camino. Que nuestra confianza no descanse en nuestro propio entendimiento, sino en tu mano que nos guía; que nuestros deseos no sean para nuestra propia comodidad, sino para el gozo de tu reino; porque tu cruz es nuestra esperanza y nuestro gozo ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.

Dios santo, tu conocimiento de mí supera lo que yo capto o veo en cualquier momento; me conoces mejor de lo que yo me conozco a mí mismo. Ahora, ayúdame a confiar en tu misericordia, a verme a la luz de tu santidad, y concédeme la gracia de tener verdadera contrición, hacer una confesión honesta, y encontrar en ti el perdón y la remisión perfecta. Amén.

¿Qué es una oración breve de bendición?

Oraciones breves de bendición

Ponte delante de mí, detrás de mí y a mi lado: protégeme y muéveme hacia aquello que me acerque más a ti. Padre amoroso, bendice hoy a mi familia con paz. Bendícelos no sólo con el favor mundano en todo lo que tratan de lograr, sino con corazones y mentes llenos de tu amorosa bondad.

¿Cuál es un ejemplo de oración de bendición?

Que el Señor le bendiga

Que el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti y tenga piedad de ti. Que el Señor alce sobre ti su rostro y te dé la paz.

Oraciones de bendición para los demás

Querido Señor Jesús, todo don bueno y perfecto es una bendición tuya y Tú me has bendecido con mucho. Te pido que me uses para ser una bendición para otros que están en necesidad o enfrentando dificultades. Hazme un canal de Tu bendición, un canal a través del cual Tu amor y paz y alegría y amor fluyan de Ti, a través de mí hacia los demás. Que yo sea Tus manos para bendecir a los demás. Que Tú guíes mis pies a lugares donde pueda ir y ser una bendición. Que mi palabra sea sazonada con sal para que pueda hablar palabras de consuelo y aliento, y decir la verdad en amor. Dame la gracia de estar disponible cuando otros lo necesiten. Señor, te ruego que aumentes en mi vida y yo disminuya, para que las bendiciones que derrames a través de mí a los demás, puedan acercar a cada uno a los brazos del Señor Jesús. En Su nombre te lo ruego, Amén.

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Quien nos ha bendecido con toda bendición espiritual en Cristo Jesús. Padre, cómo podemos agradecerte lo suficiente por la asombrosa gracia y el amor incondicional que ha sido derramado sobre todos tus hijos sin medida y sin costo. Te bendecimos y te agradecemos por habernos escogido antes de la fundación del mundo para ser Tus hijos y coherederos con Cristo Jesús nuestro Señor. Nos has apartado para ser santos e irreprensibles delante de Ti todos los días de nuestras vidas. Incluso nos has adoptado como hijos e hijas tuyos y nos has sentado con Cristo en los lugares celestiales. Tu bondad es insondable y Tu amorosa bondad regocija nuestros corazones y nos humilla en nuestro espíritu. No somos dignos de agacharnos y atarnos los cordones de tus zapatos y, sin embargo, Tú nos has elevado y nos has sentado junto a Cristo en los lugares celestiales. Te adoramos y bendecimos Tu santo nombre por los siglos de los siglos, Amén.

Ejemplos de oraciones para rezar por los demás

Principio de páginaBendiciones y oraciones BENDICIONESLas bendiciones en la Biblia son poderosas y a menudo proféticas. Mientras pronunciamos la bendición que Dios nos ha ordenado declarar, en el reino celestial aprovechamos los recursos del Espíritu Santo para bendecir a los que están en la tierra. Esta es una transmisión real de bendición espiritual. Tanto Jesús como Pablo nos dicen que bendigamos a nuestros enemigos; así que sin duda podemos bendecir a los que nos rodean en nuestra comunidad, ciudad, pueblo o aldea. No estamos bendiciendo el consumo de drogas o cualquier acto malvado en los hogares o instituciones de nuestra localidad; estamos convocando la luz de Dios para ahuyentar las tinieblas. Al incluir esta bendición domingo tras domingo, se recuerda a la Iglesia que adoramos y rezamos no primero por nosotros mismos, sino por los que están fuera de la Iglesia.

Estas letanías funcionan bien si los fieles están de pie. En los momentos apropiados pueden mirar hacia el lugar por el que rezan; y se les puede invitar a que añadan sus propias peticiones manteniendo el ritmo de la letanía. En nuestra oración necesitamos que se nos escuche como a quienes creen que sus oraciones están cambiando el mundo. La intercesión es una guerra espiritual; tenemos que rezar como quienes están en guerra por el reino de Dios. El estilo breve y nítido de las peticiones y las respuestas ayuda a convencernos de que se trata de un asunto real.Letanía – ‘Ven, Señor Jesús’

Cómo bendecir a alguien

En esta página encontrarás una colección de bendiciones y versículos edificantes e inspiradores, con bendiciones para el favor y la prosperidad, y antiguas oraciones irlandesas con las que bendecir a amigos y seres queridos. Descubra también alentadoras bendiciones de la Biblia: ¡inspírese leyendo estos bellos versículos y oraciones!

Haz descender sobre nuestros obispos y demás clero, y sobre las congregaciones confiadas a su cargo, el saludable Espíritu de tu gracia; y, para que puedan agradarte de verdad, derrama sobre ellos el rocío continuo de tu bendición.

En las Bienaventuranzas, Jesús da la vuelta a lo que normalmente consideraríamos cosas que procuran felicidad (“beatus” es la palabra latina que hay detrás de “Bienaventuranza”, que significa dichoso o feliz). Normalmente no consideraríamos el dolor, el insulto o la persecución como cosas “felices”. ¿Son bienaventurados los que lloran? La respuesta de Cristo es SÍ: serán consolados. ¿Son bienaventurados los perseguidos? SÍ – porque esto los lleva más profundamente al reino de Dios. Normalmente uno pensaría que ganar más dinero, tener una casa más grande, tener más “cosas” a nuestro alrededor, nos llevará a la felicidad – incluso que esto es bendición de Dios.