Preposición al principio de una frase
Si aprendió inglés en un entorno formal, probablemente le dijeron que no debía terminar una frase con una preposición. Pero, al igual que empezar una frase con una conjunción (¿ves lo que hemos hecho?), esta pequeña “regla” es bastante controvertida. Sigue leyendo para saber cuándo debes y cuándo no debes terminar una frase con una preposición.
Los gramáticos te dirán que, como las preposiciones deben preceder a la palabra sobre la que informan, no pueden usarse al final de la frase. Pero ya sabes que al inglés le encanta saltarse sus propias reglas, así que veamos algunos ejemplos de cuándo es perfectamente correcto terminar una frase con una de estas palabras.
Estás escribiendo o conversando de manera informal. Conversar con amigos, enviar mensajes de texto o correos electrónicos informales, o incluso producir contenidos como blogs, publicaciones en redes sociales o ficción con diálogos realistas entre los personajes son buenos momentos para terminar las frases con preposiciones.
Si utilizas el segundo ejemplo para preguntar a tu cita por la película que te ha invitado a ver, puede que te mire con cara rara. Echa un vistazo a otros ejemplos de este tipo e intenta reordenarlos tú mismo para determinar qué suena mejor.
Cláusula final con preposición
Es más aceptable terminar una frase con una preposición en la escritura casual o informal. Esta forma de expresarse es más coloquial y, por tanto, más apropiada en este contexto, sobre todo en las preguntas. Por ejemplo:
Es perfectamente aceptable terminar una frase con una preposición si la alternativa crearía confusión o sonaría poco natural. “¿Sobre qué estás sentado?” y “¡Esta es la película de la que te hablé!” suenan mucho más naturales que “¿Sobre qué estás sentado?” o “¡Esta es la película de la que te hablé!”. Varios modismos y expresiones coloquiales inglesas terminan en preposiciones. Al ponerlas al final de una frase, ésta termina en preposición. Por ejemplo:
Aunque en la escritura informal no es necesario alejar la preposición del final de la frase, puede ser mejor hacerlo en la escritura formal. Las frases que suenan naturales en una conversación pueden resultar demasiado familiares o incómodas en un ensayo, artículo o conversación formal. He aquí algunas pautas para modificar frases en la escritura formal. Las preposiciones forman relaciones entre palabras (el objeto de la preposición) y otras palabras de una frase. Pueden mostrar conexiones de lugar, tiempo o ideas. Algunos ejemplos de preposiciones son
Frases preposicionales
¿Puedo terminar una frase con una preposición?Matt EllisActualizado el 23 de noviembre de 2022Gramática¿Es correcto terminar una frase con una preposición? Muchos profesores dirán que no, pero lo cierto es que, en las circunstancias adecuadas, terminar una frase con una preposición no sólo es aceptable, sino que es la mejor opción. Sin embargo, hay ocasiones en las que debe evitarse; sólo es cuestión de aprender las reglas.
¿Y cuáles son esas reglas? A continuación le explicamos cuándo puede terminar una frase con una preposición y cuándo no. También le sugerimos cómo evitarla y le damos algunos ejemplos para que sepa a qué atenerse.
Las preposiciones son palabras que comunican relaciones entre cosas, como la ubicación o el tiempo. Por ejemplo, la preposición dentro puede indicar que alguien está dentro de una casa, mientras que la preposición a puede indicar que la clase empieza a las 10 de la mañana.
Las preposiciones no pueden ir solas y deben ir acompañadas de una frase preposicional. Al igual que los verbos transitivos, las preposiciones también necesitan un objeto, ya sea un sustantivo independiente o una frase nominal. El objeto de una preposición va después de la preposición y a menudo incluye artículos como a o the.
Frases preposicionales comunes
En el instituto, muchos profesores de inglés adoptan el principio pero. El profesor de inglés de 9º curso de mi hijo incluyó “comenzar con una conjunción” en una lista de técnicas de escritura, ofreciendo este ejemplo, But how could this be? y pidiendo a los alumnos que crearan sus propios ejemplos.
Como ocurre con muchas “reglas” de escritura, la verdad es que empezar con pero no es que esté mal o bien; es una cuestión de formalidad, énfasis y estilo. Así que no apliques acríticamente esta no-regla. Piense en sus objetivos y opciones de escritura y decida cómo quiere utilizar el lenguaje.
Puedes hacer algo más que utilizar la técnica para dar énfasis. Una vez que se sienta cómodo empezando con pero, puede utilizarlo para crear transiciones legibles y nítidas que orienten rápidamente al lector sobre un cambio de dirección. Para transiciones nítidas, pero también es una gran palabra con la que empezar.