Oración a san pantaleón para la lotería
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Estampa de San Pantaleón
La Oración a San Miguel Arcángel suele referirse a una oración católica específica a San Miguel Arcángel, entre las diversas oraciones que existen dirigidas a él. Se inscribe en el ámbito de las oraciones sobre la guerra espiritual. De 1886 a 1964, esta oración se recitaba después de la misa baja en la Iglesia católica, aunque no se incorporaba al texto ni a las rúbricas de la misa. Otras oraciones a San Miguel también han sido aprobadas oficialmente e impresas en estampas.
Oración a San Miguel Arcángel del Papa León XIII: San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla; sé nuestra protección contra la maldad y las asechanzas del demonio. Que Dios lo reprenda, te rogamos humildemente: y tú, oh Príncipe de las huestes celestiales, con el poder de Dios, arroja al infierno a Satanás y a todos los espíritus malignos que merodean por el mundo buscando la ruina de las almas. Amén.
El texto de 1890 fue compuesto y publicado veinte años después de que la toma de Roma privara al Papa del último vestigio de su soberanía temporal. La residencia papal del palacio del Quirinal se había convertido en la del rey de Italia.
Patrón de los que ganan dinero
San Pantaleón fue contemporáneo de los hermanos Cosme y Damián, que quizá sean los santos médicos más conocidos (junto con San Lucas evangelista; Pantaleón ocupa un lugar especialmente importante en las Iglesias ortodoxas, comparable al de Cosme y Damián). La siguiente historia incorpora añadidos posteriores que embellecen el conocimiento original de su vida que se había transmitido durante el siglo IV.
Pantaleón nació hacia el año 284 d.C. en la ciudad de Nicodemia (actualmente llamada Izmit, en el norte de Turquía, cerca del Mar Negro). Su madre, Eubula, era una devota cristiana que educó a su hijo en el cristianismo, mientras que su padre no se convirtió hasta mucho más tarde. Falleció cuando su hijo aún era pequeño.
Pantaleón era apuesto, de hablar suave y humilde; todos los que hablaban con él sentían verdadera felicidad y paz. Su padre, Eustorgio, lo envió a estudiar con un famoso médico, Eufrosino. Un día, Pantaleón fue con Eufrosinos al palacio donde el gobernante Maximiano Herculio (que reinó entre los años 286 y 305 d.C.) lo encontró por primera vez. Maximiano ordenó a Eufrosinos que educara a Pantaleón para que pudiera ser nombrado médico real.
Vela de oración San Pantaleón
San Pantaleón era natural de Nicomedia, cerca del Mar Negro, en Asia. Era un médico tan famoso que el emperador Galerio Maximiano le pidió que fuera su médico personal. Allí, en la malvada corte pagana, se metió en problemas. Los paganos eran personas que creían en falsos dioses y falsas enseñanzas. Pantaleón era cristiano, pero poco a poco empezó a seguir el mal ejemplo de la gente que le rodeaba. Empezó a estar de acuerdo con la falsa sabiduría alabada por los paganos. Finalmente, cometió el gran pecado de renunciar por completo a su fe cristiana.
Un santo sacerdote llamado Hermolaos se entristeció mucho al ver que el famoso médico abandonaba a Jesús. Se acercó a él y con sus sabias y amables palabras, hizo que Pantaleón se diera cuenta del gran pecado que había cometido. Pantaleón se dio cuenta de que había cometido un horrible error. Aborreció su pecado y volvió a unirse a la Iglesia.
Para compensar lo que había hecho, deseaba de todo corazón sufrir y morir por Jesús. Siguió el ejemplo de Jesús haciendo obras de caridad y atendiendo gratuitamente a los enfermos pobres. Curó a muchos enfermos sólo con la oración.