Oraciones poderosas
Aunque no sea fácil, es importante expresar nuestro pésame. Nuestras palabras no pueden quitar el dolor de la pérdida de un ser querido, pero pueden ayudar mucho a que una persona en duelo se sienta querida y apoyada.
Hay muchas buenas razones para que su mensaje de pésame sea breve. Puede ser que la tarjeta ya haya expresado la mayor parte o todo lo que usted quería decir. O puede que no conocieras bien o no conocieras en absoluto a la persona fallecida. Sea cual sea el motivo, puedes ser breve y, aun así, mostrarte cálido y afectuoso.
Consejo de redacción: si conocías a la persona fallecida pero no al familiar o familiares supervivientes a los que envías la tarjeta, puede ser útil mencionar tu relación con su ser querido (de la escuela, del trabajo, etc.).
Puede ser un gran consuelo para una persona o familia en duelo saber que otros también tenían una buena opinión de su ser querido. Si usted conocía y admiraba al ser querido que ha hecho la transición, no deje de hacérselo saber a su(s) destinatario(s).
Si puedes ayudar a tu destinatario con los preparativos, las comidas, las tareas domésticas, el jardín, el cuidado de los niños o cualquier otra cosa, no dudes en incluir una oferta en tu mensaje. Eso sí, asegúrate de hacer un seguimiento.
¿Cuál es la oración poderosa para pedir ayuda urgente?
Ayúdame, oh Madre de misericordia. Tú eres poderosa para salvarnos, en nuestras necesidades y en nuestros peligros. Porque donde falla la ayuda humana, no es culpa tuya. No puedes despreciar las ardientes súplicas de tus hijos.
¿Cómo se reza por algo que parece imposible?
Querido Padre Celestial, gracias por recordarme que nada es demasiado difícil para Ti. Cuando estoy en una temporada de espera, ayúdame a confiar en Ti y creer que Tú puedes hacer lo que parece imposible en mi vida. En el Nombre de Jesús, Amén.
Necesito la ayuda de Dios desesperadamente
No existe una fórmula especial para pedir un milagro. Dado que tu viaje espiritual es único y distintivo, ¡tu método para orar por un milagro también será único y distintivo! Desarrolle una rutina de oración que se alinee con su comprensión de lo que significa orar apasionadamente, persistentemente, con precisión, positivamente y con alabanza.
Resumen del artículo Para pedir a Dios un milagro, pídele en un lenguaje claro y sencillo que te conceda tus deseos específicos. Mientras oras, canaliza cualquier emoción que surja para ayudarte a expresarte a Dios. Ten fe en que Él responderá a tu oración para eliminar el peso de la duda de tu corazón y darte fuerzas. Después de pedir a Dios que cumpla tu oración, dale las gracias por su amor eterno y su guía. También puedes cantar una canción de oración o hacer un acto amable por otra persona para mostrarle tu gratitud. Sigue rezando todo lo que puedas y ten paciencia, ya que Dios responderá a tu oración cuando llegue el momento oportuno. Para más consejos, incluyendo cómo permanecer positivo mientras rezas por un milagro, ¡sigue leyendo!
Oración por un milagro instantáneo
“¿Tienes la más mínima confianza en algo o en alguien que no sea Dios? ¿Queda algún resto de confianza en alguna cualidad natural dentro de ti, o en alguna serie de circunstancias particulares? ¿Confías de alguna manera en ti mismo con respecto a esta nueva propuesta o plan que Dios ha puesto ante ti? ¿Te examinarás a ti mismo haciéndote estas preguntas? Realmente es cierto decir: “No puedo vivir una vida santa”, pero puedes decidir dejar que Jesucristo te haga santo. “No puedes servir al Señor…”- pero puedes colocarte en la posición adecuada para que el poder omnipotente de Dios fluya a través de ti. ¿Es tu relación con Dios suficiente para que esperes que Él exhiba Su maravillosa vida en ti?”. (Utmost for His Highest, Oswald Chambers)
Yo espero, Él se mueve. Rezo y Él aparece. Claro, a veces me encuentro con Dios, a través de obras a las que Él me llama, pero aparte de eso amo a Dios y a los demás con todo mi corazón y dejo los resultados en sus manos… Descanso, sabiendo que ya no tengo que preocuparme ni temer. Él tiene esto.
Oración para pedir a dios
Vivimos en un mundo que va a toda velocidad todo el tiempo. Es tan fácil quedar atrapados en nuestra vida diaria haciendo lo que hacemos: ir a trabajar, llevar a los niños, hacer recados y todas las demás responsabilidades que tenemos. Vivimos en una sociedad que promueve la autosuficiencia y la idea de que debemos ser “Wonder Woman” o “Superman” y no necesitar a nadie.
Las presiones constantes de la vida y de la sociedad hacen que sea muy fácil olvidar que necesitamos a Dios en nuestras vidas. Nos quedamos atrapados tratando de hacer malabares con todo nosotros mismos y no confiamos en Él. No es de extrañar que a menudo nos sintamos agotados y al límite de nuestras fuerzas cuando la vida no deja de amontonarse. Necesitamos a Dios. Todos necesitamos a Jesús cada día. Si has estado llevando las cargas de la vida por tu cuenta y no has sido consciente de lo mucho que necesitas a Dios últimamente, no desesperes. A veces sucede, y afortunadamente servimos a un Dios maravilloso y amoroso que nos da una nueva oportunidad cada día.
Rezo por mis circunstancias en este momento. Te pido que me des paz sobre lo que no puedo cambiar y la sabiduría para cambiar las cosas que sí puedo. Te pido que entres en mi vida y hagas tu voluntad. Guíame y dame el discernimiento para escuchar tu voz. Ayúdame a superar estas adversidades y a tener la victoria en ti al otro lado. Te doy gracias por los planes que tienes para mí y te doy la alabanza y la gloria, incluso en esta tormenta actual. Te lo ruego en tu nombre. Amén.